Una encuesta global a proveedores de atención médica ha revelado los efectos sin precedentes que la pandemia por Covid-19 ha tenido en la prestación de asistencia sanitaria mundial para la osteoporosis. La encuesta fue realizada por la International Osteoporosis Foundation (IOF), la National Osteoporosis Foundation (NOF) y la European Society for Clinical and Economic Aspects of Osteoporosis, Osteoarthritis and Musculoskeletal Diseases (ESCEO).

La osteoporosis es una enfermedad crónica relacionada con la edad que se asocia con fracturas por fragilidad que cambian la vida. Se estima que cada año, aproximadamente, 740.000 personas pierden la vida por fracturas de cadera. El informe elaborado a partir de la encuesta se basa en cuestionarios en línea completados de abril a junio de 2020 por 209 proveedores de atención médica en 53 países: 28% de Europa, 24% de América del Norte y 19%, 17% y 12% de Asia-Pacífico, Medio Oriente y América Latina, respectivamente. La mayoría de los encuestados (85%) eran médicos, principalmente, reumatólogos (40%), endocrinólogos (22%), ortopedistas (15%) y especialistas en medicina interna (11%).

El informe ofrece una visión de cómo la pandemia modificó la prestación de atención médica para la osteoporosis:

• Cierre de hospitales/clínicas: 21% de las instituciones solo estaban abiertas para visitas de emergencia; 23% para visitas no agudas/de rutina; 57% para citas de emergencia y de rutina; y 7% cerrado para todo tipo de visitas.
• Modalidad de consulta: 33% realizó consultas telefónicas; 21% consultas por video; 26% citas presenciales; 18% visitas urgentes en persona; y 3% otras modalidades (incluida la mensajería instantánea).
• Telemedicina: las cuarentenas y el autoaislamiento fomentaron el uso de la telemedicina. El 20% de los encuestados consideró el cambio muy útil, con una programación de más de 20 citas en línea por semana. En contraste, otro 20% solo programó de 1 a 5 citas por semana y otro 20% no programó ninguna cita en absoluto. Los problemas incluyeron la falta de disponibilidad de la telemedicina, su no-reembolso o incertidumbres sobre el reembolso.
• Evaluación del riesgo: 29% programó una exploración por absorciometría de rayos X de energía dual (DXA) lo antes posible para informar las decisiones de tratamiento; 11% evaluó a los pacientes basándose únicamente en una calculadora de riesgo clínico (por ejemplo, FRAX®); 29% evaluó a los pacientes basándose en una calculadora de riesgo más una DXA planificada en una fecha posterior; 33% pospuso la DXA; 5% indicó que su unidad de DXA estaba actualmente cerrada o que estaban remitiendo pacientes a un servicio de clínica de fracturas.
• Entrega de medicamentos: Casi la mitad (43%) informó tener dificultades para organizar los medicamentos para la osteoporosis, incluido el suministro limitado o la dificultad para adquirir los medicamentos, el retraso en la administración de infusiones e inyecciones, la reticencia de los pacientes a asistir o las restricciones de viaje/autoaislamiento que impidieron que los pacientes puedan asistir al consultorio para su control.
• Prescripciones: 28% recetó reposiciones solamente; 63% recetó tanto reposiciones como recetas nuevas; 3% emitió nuevas recetas solamente; y 4% no prescribió ningún medicamento a menos que fuera por una indicación aguda. 
• Tratamiento administrado profesionalmente: 60% de los médicos contaban con sistemas establecidos para identificar a los pacientes que recibían medicación parenteral, de modo que pudieran organizarse planes de atención; 46% pudo administrar inyecciones o infusiones con salvaguardias para minimizar el riesgo del paciente; 3% trasladó los tratamientos a una ubicación clínica alternativa; 21% sugirió retrasar el tratamiento hasta que el riesgo de Covid-19 haya disminuido; 13% recomendó cambiar a un medicamento oral; y 8% consideró coordinar la administración del tratamiento en el hogar.
• Tiempo necesario para las historias clínicas de los pacientes/historias clínicas electrónicas: 93% de los encuestados informó que tomó tanto o más tiempo que antes de la pandemia para completar la documentación. Las razones incluyeron problemas técnicos y relacionados con el flujo de trabajo, entre otros.
• Seguimiento del paciente: el tiempo necesario para el seguimiento de los pacientes fue mayor en el 39% de los encuestados y menor en el 9%. En el 45% no hubo cambios y el 7% de los encuestados no estaba seguro. A menudo, se requería más tiempo para proporcionar explicaciones o resultados por teléfono, entre otras  razones. 

El profesor Cyrus Cooper, presidente de la IOF y autor correspondiente, señaló: 

“La encuesta indica que la identificación y el tratamiento de la osteoporosis en los pacientes se ha visto profundamente afectado por la pandemia, por los retrasos en la obtención de una exploración DXA o en el suministro de medicamentos. Existe la preocupación de que durante la pandemia, en la mayoría de los casos, la evaluación y el tratamiento de referencia para pacientes con osteoporosis no se realizó, dejando a muchos pacientes sin evaluación ni tratamiento.”

La Profesora Susan L. Greenspan, presidenta de NOF y autora principal, declaró 

“Parece haber un impacto sustancial en el reembolso, lo que puede tener implicaciones para la capacidad de mantener y ofrecer diversos servicios clínicos y pruebas de osteoporosis como DXA. En los EE. UU., a pesar de que Medicare permite una mayor flexibilidad para la administración domiciliaria de medicamentos inyectables, alrededor del 39% de los encuestados no estaban seguros sobre el nuevo arreglo o no considerarían usar esta opción. Esto podría conducir potencialmente a una reducción de recursos y la correspondiente disminución en la evaluación y el tratamiento de pacientes con osteoporosis y fracturas relacionadas ".

En lo positivo, casi uno de cada tres proveedores de atención médica realizó consultas telefónicas y uno de cada cinco realizó consultas por video. La telemedicina tiene beneficios potenciales para los pacientes y puede resultar en ahorros y eficiencias para los sistemas de salud. En algunos países, se están evaluando los ajustes temporales realizados en las tasas de reembolso de telemedicina durante la pandemia para determinar las implicaciones y oportunidades en el futuro cuando las sociedades vuelvan a la “nueva normalidad".

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Lectura complementaria
• Fuggle, N.R., Singer, A., Gill, C. et al. How has COVID-19 affected the treatment of osteoporosis? An IOF-NOF-ESCEO global survey. Osteoporos Int (2021). https://doi.org/10.1007/s00198-020-05793-3 
• McCloskey, E.V., Harvey, N.C., Johansson, H. et al. Global impact of COVID-19 on non-communicable disease management: descriptive analysis of access to FRAX fracture risk online tool for prevention of osteoporotic fractures. Osteoporos Int (2020). https://doi.org/10.1007/s00198-020-05542-6  
• Clynes, M.A., Westbury, L.D., Dennison, E.M. et al. Bone densitometry worldwide: a global survey by the ISCD and IOF. Osteoporos Int (2020). https://link.springer.com/article/10.1007/s00198-020-05435-8  
• Covid-19: Updates and Resources (NOF-USA)
https://www.nof.org/covid-19-updates/  
• Covid-19: Simplified procedures for Fracture Liaison Services
https://www.capturethefracture.org/covid-19-all-ctf-fls-centers  

Acerca de la International Osteoporosis Foundation
La International Osteoporosis Foundation (IOF) es la organización no gubernamental más grande del mundo dedicada a la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de la osteoporosis y enfermedades musculoesqueléticas relacionadas. Los miembros de la IOF, incluidos los comités de investigadores científicos, así como 266 sociedades de pacientes, médicos y de investigación, trabajan juntos para hacer de la prevención de fracturas y la movilidad saludable una prioridad mundial de la atención médica. www.osteoporosis.foundation @iofbonehealth

Acerca de la National Osteoporosis Foundation
Establecida en 1984, la National Osteoporosis Foundation es la principal organización de salud de los EEUU dedicada a prevenir la osteoporosis y los huesos rotos, promover huesos fuertes de por vida y reducir el sufrimiento humano a través de programas de concientización, educación, política e investigación. Para obtener más información sobre la Fundación Nacional de Osteoporosis, visite www.nof.org